TRIFULCA

Sed virginal, castrados inmundos, jorobados en fangos evadiendo el estiércol de la realeza.

No serás más madre.
Las pirañas devoraran tus senos, los demonios violaran tus deseos, y el máximo condenado torturara asesinos bestiales, burdos de ser…

¡Ah! La puta envidia me aturde.
Por que yo no te puedo destrozar, dejando cristales en tu cuello y viendo la sangre coagular mis 2 ancestros literales me elogiarían después de tal acto en arte natural.

Mujer debí ser. Bendita la pluma del Dios que libero la presa de podrida iluminación.

lunes, 8 de diciembre de 2008